“El auto tomó la curva prepotente. Todo en él era prepotente: el buscahuellas, la bocina, el escape, infundía ánimos. La botella que trajo, también infundía ánimos. -Se la robé a mi viejo…-”
La madre de Ernesto Abelardo Castillo
Googleando “buscar un celular robado” nos aparecieron 237.000 resultados, desde aplicaciones buchonas que le sacan la foto al tipo que lo tiene, hasta rastreos por IMEI, el código que identifica tu aparato, con localizaciones satelitales que te dicen en que casa está, como se llama el ladrón, si está bajando pornografía o comiendo milanesas o sopa de maní, no podés errarle. Cada minuto se sofistican las formas para recuperar tu teléfono. Debemos entender que todas estas herramientas las tiene, las estudia y las pone en práctica la Policía. Es su laburo.
El pasado 12 de Octubre en la esquina sureste de la media manzana que ocupa el colegio del Huerto, Egues y Moreno, a las seis y tantas de la mañana, acuchillaron en la pierna al salteño Pedro Enzo Nicolás “Nico” Menghini Rodriguez (34) para robarle su celular LG. Es una esquina donde se han perpetrado muchos asaltos. Ahora hay una verdulería grande, cerrada, antes era un espacio abierto donde hubo un karaoke, una sandwichería, que nos acordemos, con largos períodos sin actividad, enfrente hay un baldío con varias obras en construcción, y en paralelo, calle mediante, las paredes del colegio, solo en un vértice hay casas. Es un punto vulnerable a simple vista, de pasada, no es que los motochorros sean doctos en geopolítica criminal, todo lo contrario, suelen ser borrachos o drogados que ni saben donde están parados, atacan de arrebato, al voleo, rabiosos, como lobos.
Menghini vende seguros de vida, es entrenador de fútbol en Gimnasia y tiro y de su barrio Titanes. Fue derivado de urgencia a su ciudad donde debieron amputarle su pierna afectada de la rodilla para abajo. Sigue internado delicado.
Su familia se presentó en la Fiscalía con una abogada el 22. No había mucho para decirles salvó que había un rastreo satelital de su celular que, esperaban, fuera activado. La cosa dio resultado este Sábado 27 en el que, perdón por nuestra ignorancia, habrá sonado una campanita, o una alarma, o lo habrán visto en una compu o les llegó un informe vía satelite, andá a saber, y tuvieron la localización del LG de la victima. En la tarde mientras los medios informaban que dos de los detenidos fugados de la comisaría de Yrigoyen era recapturados, los del GAP de homicidios iban por los poseedores. Demoraban a dos changos, uno de 20 y el otro de 21, CEC de la calle Pueyrredón y GIS de barrio 20 de Febrero, que lo tenían y de acuerdo a testigos de ultimo momento son los asaltantes. No tienen antecedentes. Serían adictos y uno es hijo de un gendarme de alto rango que no puso reparos en el procedimiento. El chico vive acomodado y no le falta nada. ¿Oveja negra?.Tienen que declarar por robo calificado por arma y tentativa de homicidio. Se dice, como coautores.