Los perros traídos de Salta y Jujuy para buscar la cabeza de un vecino de Pichanal encontrado decapitado en una extensa zona de campo cercana a la balanza de la 34 se clavaron frente a una aguada lindante al cuerpo. Policías y bomberos se enterraron en el barro sin hallar nada. También fue falsa alarma una bolsa con cueros que husmearon nerviosos.

El Kino Almaraz (41) tenía uno de los puestos de animales que bordean el río Colorado de la vieja Villa Rallé aguas arriba. Casado con cuatro hijos.

El GAP de homicidios averiguó que tenía problemas, denuncias cruzadas mediante, de robo de vacas con otros chaqueños colegas cruzando la ruta cerca del Francini. El nudo con el que le ataron las manos a la espalda era el que ellos usan para manear reses.

A eso de las dos de la mañana del primer sábado de octubre, de acuerdo al grito que otros puesteros del sector escucharon, se habría cometido el crimen. Pensaron que era el sapucay de un machado.

Este Domingo se realizaron cinco allanamientos contra los hermanos acusados de cuatreros. Ambos fueron detenidos.

Declararon esta mañana en Graves Atentados ser totalmente inocentes del homicidio doblemente calificado por alevosía y concurso premeditado de dos a más personas que les imputan. Hubo secuestro de un machete afilado.

La hipótesis del conflicto vacuno como móvil del horrendo acto es una de las que se barajan. Otras apuntan al crimen mafioso y a la decapitación como mensaje. Durante los próximos diez días el expediente estará bajo secreto de sumario.