“Sabías la verdad y la enterraste dentro de tu boca…”
Barrabás     Arturo Úslar Pietri
Estamos a mediados de Marzo del 2020. Madruga entre los camiones bostezantes de la estación de servicio de Aguas Blancas una chica boliviana de 19 años que deambula confundida. Tiene un fuerte olor a alcohol, dice que no se acuerda como fue a parar ahí, que le falta el celular y la bombacha.

Sabe que el papá la espera en Bermejo, ella estudia en Salta. Al rato con escolta familiar reclama en la Policía que el remisero que tomó en Orán la ha violado y le ha robado. Es uno que le dicen “Chino” y tiene el tatuaje de un Cristo en el hombro. Le ha dado de beber un líquido blanco que la durmió.
Estamos en Junio del 2021. El Jueves 22 y Viernes 23 está previsto el juicio del “Chino” Edmundo Gabriel Emanuel Colque (33) por abuso sexual con acceso carnal. Nació en Mendoza, es chofer de taxi, vive en la frontera. Ha declarado que tuvo relaciones sexuales con la chica pero gustosas y complacidas.

La causa se ha edificado en base al testimonio de la victima.

En el debate explica que ha mentido, que inventó lo de la violación por miedo que su padre la botara de la casa. Que por la pandemia no pudo decir la verdad antes, como quería. Estaba desesperada porque había perjudicado a muchas personas, sobre todo a Colque con el que había hecho el amor y nunca la guerra.

Su relato era anillo al dedo con el de los policías y el sereno sobre que la violación apareció cuando se presentó con su padre. El fallo del Juez Raúl Lopez quedó diferido para mañana Lunes. El remisero lleva un año y cuarenta días de prisión preventiva.