“Había esperado algo que no pasó, no sé bien qué, alguna clase de éxtasis. La hostia me decepcionó como algunos años más tarde me decepcionarían las drogas, aunque insistí más con la merca que con Dios…”
La virgen cabeza        Gabriela Cabezón Cámara

Los promocionales policiales establecen que con cada gramo de pasta base de cocaína ingresan al mercado ocho dosis o pacos. No lo inventaron, en la red hay actualizaciones medicolegales que hablan hasta de doce dosis por gramo.

Hay que pensar en un tipo que pesa el polvito y después con un cuter lo divide con una cruz en cuatro cuartos repitiendo el procedimiento en cada cuarto, un laburo de relojero. Le quedan ocho montoncitos escuálidos que con un poquito de tiza, aspirinita, de harinita o de talquito los presenta en coquetos plásticos de colores.

En el último operativo de Drogas Peligrosas concretado el 7 a las tres de la tarde en Mitre al 1100 del barrio del mismo nombre con tres gramos de cocaína acusaron a las chicas Marcelino de vender droga. Haciendo cuentas eran en realidad 24 dosis eso si no tomamos 12 por gramo que serían 36.

Distinto la semana anterior en barrio Chatarrero donde hallaron en lo de Fernanda Michel (28), a la que venían investigando como expendedora, 247 caramelos de bazuco cuyo contenido vino a pesar 26 gramos. Ahí el fraccionamiento era nueve y algo más por gramo en perjuicio del cliente.

En la AP 110/20 la acusan de tenencia de estupefacientes para comercialización. Sea en gramos o en dosis era mucho Paco.