“Busco un ratoncito gris al que le gusten las cosas como a mí…”
La lechuza y el ratón (cuento infantil)   Beatriz Rodriguez
El abastecimiento de vehículos para motochorros no sigue los carriles normales. El chorro no va a un negocio y pide precio, se lo afana directamente. Salir a “ganar” en una moto legalmente adquirida está mal visto en el gremio. Para eso andá y comprate un celular en vez de aterrorizar mujeres y niños para proveerte.

A la hora de hacerse una moto para delinquir no existen miramientos. Hace un par de semanas levantaron una Honda Bros 125 cc propiedad de un sargento ayudante de la Brigada de Investigaciones y hasta el día de hoy el funcionario anda a pata con el dato de un posible victimario del barrio Estación.

Es como si una rata le robara un pichón a la lechuza, su depredador natural. Es posible que un día de estos el dueño de la moto tenga que perseguir a sirena batiente su propia moto robada. “Qué lindo que andaba” dirá, si no la alcanza.