“No había tampoco rejas en ningún lado; daba la impresión de que muchas de las puertas estarían sin llave…”
Crímenes imperceptibles G   uillermo Martínez
Dos y media de la tarde. Martes 3 de Noviembre. Barrio Constituyentes. Una abuela está en la puerta de su casa cuando escucha, adentro, ladrar a los perros. Piensa que debe ser su nieto machado que vive en la vivienda colindante. Entra al cuarto y ve unos pies asomando debajo de la cama. “¡Salí de ahí A…!! rezonga.

Para su terror alguien emerge pero no es su nieto, es un desconocido que agarra el ventilador la empuja con violencia y sale carpiendo. La pobre mujer grita. Alertado el nieto corre al ladrón, lo reduce ayudado por otros vecinos, y recupera el artefacto. Una patrulla llega y se hace cargo del escoriado sujeto.

Se trata del convicto Franco “Pichula” Velardez (28) de Estación. Un cómplice ha escapado. Evidentemente se han metido saltando el enrejillado contando que la dueña de casa tiene 81 años. El cobarde plan les salió mal. A Velardez la Brigada lo buscaba por robo de motos identificado en filmaciones de cámaras de seguridad. Va a sumar más de una causa.