“¡Yo seco esto y me voy! No he venido para hacer tertulia…”
Las botellas y los hombres Julio Ramón Ribeyro
Las trasnoches del Cruce son pasto para las fieras. Mucho alcohol, mucho malandra, mucha prostitución, mucho narco soñando millones, mucho pichero. Condimente con gente de pocas pulgas y los crímenes brotarán.
En tribunales se juzga desde el siete del mes a seis integrantes de la patota “La Florida” de la Misión por dejar medio muerto a chuza y machete al sereno de una finca de Colonia que fue a comprar coca. El hecho data en febrero del 2020 en los comederos del Cruce. Anoche en el mismo sector un tipo saltaba de bronca porque dos se ponían a mear en los rincones.
Uno se iba más lejos y el otro lo jeteaba ofendido. Terminaba mortalmente herido con un cuchillo levantado de una de las mesas. El identificado como Aldo Facundo (45) moría antes de llegar al hospital. Su agresor era detenido en su casa.
Marco Antonio Dávalos (35) remisero venía muchas horas chupando. Lo acusan de homicidio. Uno más en el Cruce de Pichanal.