
“¿Acaso te sientes como un calzoncillo muy usado?…”
El rabo de la gran mona Antonio Benítez Rojo
En el catálogo de las más monstruosas conductas humanas la que hoy confesó un hombre de 56 años en la Sala I de Juicios ocuparía los primeros lugares. Aceptó haber abusado sexualmente de su nieta de ocho años y haber corrompido a su hija menor.
Acordó un abreviado que estuvo a punto de caerse al negar el acceso carnal pensando en el pene siendo que había sido con los dedos.
Explicado el repugnante detalle el trámite cerró con la imposición de diez años de cárcel.
La denuncia fue en diciembre del 2023 y el escenario un domicilio de asentamiento al sur de la ciudad.
