
“Todo el rostro, blanco fantasmal a la luz de la luna…”
Una pelea dura Ambrose Bierce
Teófilo Nina (40) vivía barrio El Milagro era originario de la Paz para agosto del año pasado llevaba cinco años en la ciudad casado con Katia, una oranense, padres de tres hijos pequeños. Tenía un local de arreglo de impresoras.
En la madrugada del cuatro andaba en su Gilera con su amigo el chaqueño Abel León (49) un vendedor ambulante y armoniquista muy conocido de la gente. Iban por su mano en calle 9 de Julio cuando un Corsa gris los embistió de frente y siguió de largo. Sus cuerpos quedaron quietos sobre el asfalto. Nina sin vida y el chaqueño aún respirando con el cuerpo devastado. Sobrevivió.
Al volante del Corsa iba Victor Hugo Castagnaro (37) desocupado del Chatarrero con un nivel de alcohol y un cóctel de cocaína entre otras drogas por el que de siete cuadras atrás ya venía de contramano. Lo acusaron de homicidio y lesiones graves culposas primero pero en el proceso modificaron el tipo penal a homicidio simple y tentativa de homicidio con dolo eventual.
Ayer se realizó la audiencia de control de acusación defendido Castagnaro por el abogado Cristian Illezca quien alegó en el estado que estaba su cliente no podía representarse matar a alguien si por poco de intoxicado no sabía ni como se llamaba.
El Juez Oyarzú coincidió con sus argumentos y retrotrajo la acusación a la primigenia subiendo de lesiones graves a gravísimas calificadas por imprudencia por darse a la fuga y estar bajo los efectos de estupefacientes. De su libertad ni se habló ni se pidió ni se la dieron ni se la van a dar. Es una cosa que se resolverá Juicio mediante.
En esa etapa seguramente la fiscalía y la querella ejercida por Joaquín Velez van a insistir con su teoría del dolo eventual.
Baste recordar el caso de la chica Bridoux que llegó a debate con dos fallos a favor de Impugnación por doble homicidio culposo de las hermanitas Barba y terminó sentenciada por homicidio simple. No está dicha la última palabra.
