Un interno de la unidad carcelaria 3 fue trasladado el viernes al hospital afectado de una patología gástrica. Una urgencia. Estaba alojado en el pabellón B planta baja y trabajaba en el sector mantenimiento. Hace rato venía complicado del estómago. Murió.
El “Diente” Andrés Francisco Medina (54), dicen, era un tipo querido penal adentro tanto por los compañeros como por los guadiacárceles.
Purgaba doce años de prisión condenado en diciembre del 2019 por las heridas que le provocó en el cuello a su mujer un año antes (hemisección de traquea y sección de borde inferior de glándula parótida izquierda). Tentativa de femicidio el delito. Resultado de una pelea. La víctima se negó a denunciarlo pero por la gravedad de las lesiones se actuó de oficio.
Cumplía en el 2030.