“En la calle el aire está sucio, licuado en una niebla turbia…”
Nombre falso    Ricardo Piglia
Ayer, cerca de las once de la mañana, se presentó en Garantías I Diana Soledad I (31) la gendarme que manejaba el Agile del accidente donde perdió la vida el “Lechuzón” Medina (50) la madrugada del domingo pasado. La acompañaba Ramón Saldaño, su abogado.

Cumplido en trámite caminaron media cuadra hasta la sede de Graves Atentados donde podía declarar o abstenerse bajo cargos de homicidio culposo agravado. Le informaron causa de detención en ese expediente con número 64520/21.

Las pericias sobre su chevrolet constataron daños de reciente data en el lateral izquierdo, impregnación de material color negro (el color de la moto Guerrero 150 de Medina) fricción en rueda y mancha de sangre en el marco superior de la puerta de atrás levemente deformada. En el centro de video vigilancia quedó registro fílmico del siniestro. La pregunta crucial es por qué siguió de largo sin detenerse.

Ella iba por la Pringles para el centro y el Lechuzón por la Pueyrredón hacia el hospital. En la bocacalle colisionaron. Le otorgaron arresto domiciliario.