“…A mí no me quedaba sino resignación dados mis pocos años. ¡Se tienen las carnes muy tiernas a tan corta edad!…”
La familia de Pascual Duarte Camilo José Cela

En Mayo del 2017 el drama a voz en cuello de una abuelita sobre que el marido de su hija violaba a su nietita de cuatro años en los asentamientos al sur de la ciudad llegó primero a los agentes sanitarios y poco después a la Policía. El aludido tenía varias causas por violencia contra su mujer, siendo, ambos, adictos. Además, el “Mojo” Cristian Omar Ortega (31) figuraba con ficha propia en la Brigada por delitos contra la propiedad.

Tenía una condena del 2008 de dos años en suspenso. Recién lo capturaron en Septiembre y por esas martingalas judiciales entraba y salía. En Marzo de este año protagonizó una fuga con otros tres de la Comisaría 9 de Julio logrando 48 horas de libertad a pata suelta. Cayó jornaleando en una finca del 28.

Hoy, en las preliminares de su juzgamiento en Sala I por lesiones leves agravadas por violencia de género (4 hechos) desobediencia judicial (4 hechos) abuso sexual simple agravado por la guarda y la convivencia (la nenita no fue accedida) más promoción y facilitación de la prostitución (ella dijo que la había hecho acostar con un tal Mono) fiscal y defensora pidieron un trámite abreviado por los tres primeros hechos. Descartando lo de la prostitución porque al tal Mono nunca lo encontraron.

FIJANDO SIETE AÑOS DE PRISIÓN EFECTIVA.
El hombre confesó ser el autor de lo que a aquella abuelita desesperaba hace dos años. Buscaron a su ex pareja (además una de las victimas) para informarle el arreglo. No dijo nada. Se fue rápido. Antes había pedido sacaran de la sala al imputado porque le tenía mucho miedo.