El blanco amarillo gugleado simboliza pureza, pulcritud, orden e inocencia, y genera una sensación general de calma, paz y sosiego. En nuestra zona esa mezcla de colores nos enfrenta  exactamente a lo contrario. Los rectángulos amarillos con polvo blanco en su interior son sinónimo de violencia y caos.

Cada bendito día del mundo en marcha se corporizan de las formas más inauditas ocultos en ambiciones pérfidas, nerviosas.

El Lunes controlaron a la seis de la tarde un San Antonio en el puesto 28 de Julio de gendarmería en ruta 50. En la bodega a siete bultos sospechosos se los escaneó y por si fuera poco de olerles el can antinarcóticos tuvo una catarsis de ladridos.

Entre seiscientos pares de medias venían catorce rectángulos apanados con catorce kilos setecientos ochenta gramos de cocaína. El dueño Rafael Gonzalo Zutara (33) agricultor de Bermejo quedó preso de la Justicia federal.

Horas antes la misma suerte había corrido una mujer que en un taxi dentro de unas cubiertas transportaba veintitrés paquetes amarillos con veinticuatro kilos del polvo prohibido. Blanco con estuche amarillo.