“El alma del lastimero fugitivo se debatía en el vértigo de la esperanza…”
La tortura de la esperanza Auguste Villiers De L´isle Adam
Cuando comprás un objeto robado cometés un delito. La figura se llama encubrimiento y tiene una pena de seis meses a tres años de prisión. Lo mismo encubrís ocultando una prueba a la Justicia o brindando ayuda a un delincuente. Es excarcelable. Es decir, hasta que en un juicio se defina tu culpabilidad, permanecés en libertad.
En las redadas del fin de semana pasado la Policía de la 24 demoró a un hombre del 4 de Junio al que le saltó un pedido de captura por rebeldía en una causa Penal. El 31 de Enero del 2019 Gustavo Nicolás Cuello (44) faltó estando notificado al juicio previsto en su contra por encubrimiento. Lo declararon rebelde y fugitivo.
Ahora le costó estar veinticuatro horas preso hasta que el Juez de la Sala I le dió la libertad con la recomendación de presentarse la fecha que lo vuelvan a citar al debate. Moraleja: Si no querés que te metan en Cana asistí a las citaciones judiciales y no compres cosas de innoble procedencia.