“La decisión de matar a su esposa había sido casi una ocurrencia de última hora. El motivo era simple: la odiaba…”
Pesadilla en amarillo      Fredric Brown
En el 2004 en en el barrio balvanera de Buenos Aires ocurrió la catástrofe no natural más grande de la historia argentina con el incendio del boliche República Cromañón donde murieron casi doscientos chicos que habían ido a ver al grupo de rock Callejeros. Una bengala inició el fuego.

Pasados los años los integrantes de la banda fueron condenados a seis de prisión. El baterista Eduardo Vasquez (45) ya cumplía cadena perpetua por la muerte de su novia Wanda Taddei en el 2010.

Ella se había prendido fuego en una discusión rociada con alcohol.

El pasado 26 de abril en Orán un émulo local de Vasquez arrojaba combustible y luego un fósforo a su novia reciente de 25 años. Los parientes la conminaron a denunciar y hoy está en Salta para someterse a unos injertos de piel en brazos y manos.

Los protagonistas son adictos y marginales. Sergio Ariel Torres alias “Tuerto Kelo” (40) pasó ocho años en la cárcel por robo calificado y estaba rebelde en la Sala I de Juicio por faltar a una causa de amenazas contra un policía.

Su victima era en Septiembre del año pasado la mujer del Seba Guanca muerto delante suyo en la puerta de Villa Bombilla donde les prestaban para vivir. Su hermana está presa por drogas. Hacía un par de meses andaba con Kelo. Estos días debería declarar en el homicidio en el que la Brigada informó que estaba tan drogada que los tuvo dando vueltas con nombres y direcciones falsas o cambiadas. Torres también es adicto y Guanca lo era.

Lo acusan de intento de femicidio. Fue la noticia vernácula de la semana.