Hasta hace unos años era lectura obligatoria en la materia literatura de la secundaria el libro El Túnel de Ernesto Sábato que comienza con el hoy políticamente incorrecto relato de un femicida: “Bastará decir que soy Juan Pablo Castel, el pintor que mató a María Iribarne; supongo que el proceso está en el recuerdo de todos…”. Sospechamos que el libro ya no figura en los programas. La violencia contra la mujer se ha estereotipado, ya no son infinitas historias sino una sola, la del hombre cruel sobre la fémina indefensa y débil, que, muchos creen, está en los genes constitutivos de la especie, idea curiosa si se tiene en cuenta que llevamos más de cien mil años de evolución y según paleontólogos ilustres sobrevivimos gracias a la capacidad de tener muchos hijos. ¿Habrá sido siempre forzando o violando a las hembras?. ¿Masacrándolas?.

Para la Justicia todos mienten o actúan por intereses espúreos que ellos descubren para descartarlos y castigar por planilla. A todos con la misma vara no me vengas con cosas raras.
Por ejemplo que una mujer a la que el marido casi mata de 18 puñaladas les pida que lo dejen libre, que su vida y la de sus cinco hijos es un infierno desde que no está, que no puede mantenerse, que el único que paraba la olla en su casa desquiciada era él, que fue de borracho, que debe haberse drogado, que no quiere que siga en la cárcel porque no es bueno para nadie y más que nada para su familia librada a la zozobra y al hambre sin que a nadie parezca interesarle o hacer algo por eso, no es relevante. La declaración de Emilse C está en la Causa que se sigue contra su concubino de 11 años y 5 hijos, el Guata Adrían Mario Noveno (31), un changarín con el que vivía en barrio Kirchner, que la mando al quirófano agujereada a cuchillo y necesitada para seguir con vida de treinta puntos de sutura y la extracción de un litro de sangre de una hemorragia interna producida por las heridas, en Octubre del año pasado. Es más, juntando moneditas visto sus ruegos inútiles, ha contratado un abogado para que lo saque libre en el Juicio que dio inicio en la Sala II a cargo de Raúl Lopez el Viernes 24 de Agosto. Está acusado de oficio por homicidio calificado por violencia de género y por convivencia en grado de tentativa. Noveno no declaró. Ella sí. Hizo una aclaración importante: quería su libertad por sus hijos que si fuese por ella que pague lo que corresponde. Eso ya es otro cantar.

El acusado en sus datos personales confesó su adicción al alcohol pero negó haber consumido drogas, una de las razones que su mujer especulaba lo habían hecho obrar tan violentamente aquella noche. En la requisitoria se pasó revista a una vida familiar conflictiva con antecedentes de malos tratos y exclusión, hacía dos semanas que se habían arreglado. Se escuchó el relato de los hijitos, uno pegándole con un palo al padre y el otro pidiendo junto a su madre ensangrentada que no se muera. Con todo Emilse dice que nunca tuvo antes una reacción así. El caso es que la victima no quiere que castiguen a su agresor. El que por poco la manda a la tumba. Es difícil si. ¿Y si le hacen caso y sale y la mata?. No van a poder echarle la culpa a ella. Todos estarían de acuerdo en que debieron protegerla, aún contra su voluntad. Es difícil. ¿Usted qué piensa?.