“Durante unos instantes fui presa del terror y la ansiedad; me sentía impotente…”
El robo del elefante blanco Mark Twain
Cerca de las cuatro de la mañana de hoy Sábado un alerta de posible robo en proceso se activa. Es en pasaje Sevilla del barrio Güemes. Unos desconocidos andan trepando tapias en medio de la oscuridad. Llegan los del grupo de intervención policial.
Sumida en una crisis nerviosa una mujer de 52 años tartamudea que se le han querido meter a la casa por el techo. Pide que entren y busquen. En el fondo los perros ladran enloquecidos. Hacia allí se dirigen los policías luego de verificar el interior despejado. Ven la puerta de un habitáculo con las bisagras rotas. “Los tenemos” piensan. Adentro no hay nadie, solo una mochila semiabierta en el suelo.
Contiene 10 lingotes de pura cocaína 24 kilates con peso neto de 10.472,2 gramos. La dueña de casa jura que no es suya. Drogas peligrosas se hace cargo de investigar el misterioso almacenamiento. Los diez kilos son remitidos al depósito judicial en calidad de secuestro.