“-Si tanto te incita, intenta entrar a pesar de mi prohibición…”
Ante la Ley     Franz Kafka
Han hecho el amor mil veces, se han peleado, se han celado, se han reconciliado, hasta un día que ella le niega el permiso que él cree no necesitar y el idilio se vuelve criminal. El odio desplaza al amor. No ha sido consentido, de buen grado, querido, compartido. El alguna vez amado es ahora un violador aborrecido. No se trata, claro, del monstruo lujurioso que persigue a la ninfa virgen por el bosque para ultrajarla, es otra cosa.

El abogado salteño Pizarro Echenique que defendió al sargento de policía (ex) Enrique “Coti” Coca oriundo de Los Toldos con revista en Colonia Santa Rosa, acusado de abuso contra su novia (ex) una estudiante de 22 años, alegó sobre el ombligo de la ofensa: la falta de consentimiento.

Aquella noche, en el inquilinato donde vivía, habiendo regresado un poco tomada de una reunión con amigos la chica le había mandado mensajes a su cliente para que fuera abriéndole la puerta de la pieza ya la relación intoxicada de celos y reclamos. Adentro se sintió forzada por el novio enceguecido sordo a sus palabras.

El Policía (ex) fue sentenciado al mínimo de la pena, seis años de cárcel, por abuso sexual con acceso carnal. El proceso duró del 18 de abril del 2019 al Jueves 2 de diciembre del 2021. En el celular secuestrado al funcionario (dado de baja) la victima figuraba en sus contactos como MI AMOR.