“-Has batido el record mundial de cagadas -dijo a manera de saludo-. Lo sé ayudame a pensar…”
Diario de un killer sentimental Luis Sepúlveda
Fue un estudiante secundario que en clase tenía respuestas brillantes. Que asombraban. No era un traga sino alguien agudo en sus percepciones, inteligente. Le decían “Cráneo” o “Cerebro” por eso. Facundo Miguel Cardozo (23) terminó el Bspa como mejor compañero.
Y si sus calificaciones no fueron óptimas fue por su inconstancia de preferir su barra de iguales y la joda de la pichicata al colegio. Era del 2 de Abril, un asentamiento pobre y sabía de la cárcel por sus padres. Sin embargo entró a la Unsa en la Tecnicatura electrónica.
El 27 de Agosto del año pasado lo detuvieron frente a su casa sospechado de ser uno de los tres que una señora había encontrado esa madrugada en su tendedero descolgados del enrejillado que había corrido con una pinza resultando con un tajo en el dedo por el que volvió y le espetó sin remilgos “¡Qué hablás vieja de mierda te voy a cagar matando!”.
Al único que reconocieron los vecinos fue a un tal “Hueso” Gallardo que hace cinco meses cayó preso por otra cosa y lo engarzaron en la causa 59311/19 cuya carátula fue ROBO CALIFICADO POR ARMA EN POBLADO Y BANDA Y CON ESCALAMIENTO EN GRADO DE TENTATIVA. Un choclo. Según los vecinos el tal “Hueso” es un sobrino del “Reyna” Sergio Reynaldo Gallardo (33) que era más fácil de imputar por sus frondosos antecedentes. Había un tercero capturado, el “Chinito” Miguel Angel Vasquez (24) que completaba el tandem.
Todos el 10 de Septiembre hicieron un arreglo abreviado por tres años y seis meses Gallardo y tres y cuatro Cardozo y Vasquez.
Si es cierto lo que dice su madre que el universitario confesó algo que jamás hizo para salir en siete meses y seguir estudiando no fue una decisión brillante. Detrás del descalabro está la adicción a las drogas y las malas juntas. Una lástima regalar así un futuro tan auspicioso…TODAVÍA PUEDE.
