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“Comenzó a enrollar el carrete sintiendo que era casi feliz…”
Hombre junto al muelle Daniel Moyano
Que a un penado habiendo cumplido las dos terceras partes de la condena le otorguen la libertad condicional es su derecho e implica una serie de trámites y filtros.
El viernes de la mano del abogado Fabricio Torres fue beneficiado un chango de 33 años que de una condena de ocho años de prisión por abuso sexual calificado llevaba privado de libertad seis años un mes y cuatro días. Su hermano mellizo (sancionado por el mismo término y el mismo delito) logró el beneficio hace unos meses estudia en la Unsa y su reinserción social es un hecho.
El liberto flamante tenía concepto y conducta ejemplar al tercer trimestre del 2024 cumplía un régimen de semilibertad y salidas transitorias (dos domingos al mes) y unos informes psiquiátricos y psicológicos positivos.
El Juez Aldo Primucci a cargo de Ejecución concedió que vuelva a vivir con su mamá sin poder ausentarse más de cinco días sin avisar con prohibición de tomar, drogarse, usar armas, y abstenerse de concurrir a ciertos lugares; abstenerse de frecuentar ciertas personas, que no especifica. ¿Cuáles serán esos ciertos lugares y personas prohibidos?.
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