“-Basta de sainete- gritó-. Malevos de carnaval, taitas de cartón, ¡aquí hay un hombre, si quieren pelear!…”
Adan Buenosayres Leopoldo Marechal
El día de cobro para los trabajadores de las fincas de Salvita en la Colonia es el Miércoles. El 15 de Mayo al atardecer volvían los de la banana y los del tomate en compactos grupos de bicis y motos con parada obligatoria en lo de Severo de barrio Parque Los Pinos para bajar las cuentas de fiado de la semana. El lugar queda de paso, en la desembocadura del camino al Lipán.
Cerveza va cerveza viene los tomateros y los bananeros hacían esquina y rancho aparte. Separados por metros de la ventana del negocio. Según los testimonios recogidos Dalmiro Ponce (19), bastante machado, empezó a bardear a los del tomate, sector del que lo habían corrido. Un capataz le reclamó que dejara de joder y hubo un conato de pelea que sofocaron los más lúcidos. Al rato el chango volvió emperrado por el alcohol para trenzarse con el “Ñato” Pascual Alberto Maza (24) y luego de unas piñas y corridas apareció bañado en sangre cayendo en la vereda. Con el cuchillo en la mano Maza se despidió de la escena con un “yo te dije que no te metieras conmigo”. Hubo un desbande general.
Derivado a Orán Ponce pasó directo a quirófano con un diagnóstico de evisceración por arma blanca, cortajeado en manos brazos hombros y tórax. Es de Tartagal, hace cuatro años se juntó con una chica y vive y trabaja en la Colonia, tienen un bebé.
La Policía local y la gente del GAP buscaban al Ñato bajo sospecha de tentativa de homicidio. Es del Manero. Tiene tres hijos. Al tipo se lo había tragado la tierra. Ubicaban su moto. Decían que se había escapado a Cerrillos, a Formosa, aseguraban otros, al Valle de Lerma. Esta madrugada fue detenido por la Policía de la Colonia junto a una hermana. A ella la acusan de encubrimiento. Hará legalidad y se escuchará su versión de los hechos que en la AP 322/19 variaron de lesiones gravísimas a homicidio en grado de tentativa.
La victima pasó de terapia a una habitación de cirugía.
En Embarcación la noche del 16 mataban de un cuchillazo a Federico Martinez (21), otro jornalero que acababa de volver de una finca también de Salvita e iba a ver el partido de Boca. Es de la Misión Franciscana.
Detuvieron al “Ojón”, un menor.
Peleas callejeras, jornaleros, alcohol y changos que, o la pierden, o se cagan la vida en un segundo.