“Comprendí que si me alcanzaban habría de perecer bajo la lluvia de sus pies…”
Barrabás Arturo Úslar Pietri
La semana de los mega juicios amenaza convertirse en la de los mini juicios.
En el salón de actos del rectorado de la Unsa, con los Jueces de Sala I en el escenario y los imputados mirando desde las butacas como en un cine, a dos años y diez meses del crimen del Takashi Segovia Vargas (24) en los asentamientos Libertad, se largaba la tercera que tenía que ser la vencida luego que fracasaran los dos primeros debates en Diciembre y abril últimos.
Ocho imputados de la turba enardecida que ultimó a patadas, machetazos y piedras a la victima. Por alguna razón, o por ninguna, la sesión era secreta sin acceso a la prensa ni al público.
El arreglo se veía venir, además, porque ya había asesinos confesos.
Diez años y ocho meses de prisión para los que eran mayores al momento del hecho, a saber, el “Pichón” Pericón (21), el “Pepón” Amezaga (22), Maxi Juarez (21) y Osvaldo Andrés (22) y de los menores responsabilidad al “Formoseño” García (hoy 19) con la prueba certera de un ADN positivo de la sangre de Vargas en su ropa.
Mucho gusto, mucho gusto. Lo que iba a durar seis días duró dos horas. El Lunes que viene se reúnen para escuchar a la madre de la victima antes de firmar el abreviado.