“-No culpe sino a su empeño lo que suceda…”
Cuentos de muerte y de sangre Ricardo Güiraldes
Última hora del domingo. Sarmiento y San Martín. Una chica de 27 años sale al cruce de un móvil de la Brigada que anda en circulación. Pide ayuda.
Cuenta que un tipo en cueros y totalmente borracho o pipeado ha porfiado con abrir la puerta de una peluquería para robar. En uno de los embates ha alzado un set de maquillaje, un celular y una cartera siendo reducido por un chango testigo del hecho.
Lo identifican Walter Andrés Rueda (35) del Constituyentes dueño de un prontuario calamitoso. Tiene una oreja cortada y un brazo roto. Dice haber tenido entrevero con una tal banda del Fito quienes con cuchillos, palos y cadenas gruesas lo han dejado a la miseria. No miente.
En el hospital le enyesan el brazo derecho fracturado y le suturan el pabellón auricular izquierdo tajeado.
Sus lesiones no lo salvan de una nueva causa penal por robo. Sí de las esposas. No pueden ponérselas.