“Yo tenía veintidós años, una edad en la que casi todo es todavía disculpable…”
Crímenes imperceptibles Guillermo Martínez
La zona del tanque frente a la escuela Arturo Illia es peligrosa. Está en el límite de Caballito y los 200 Años. Expendios de droga compiten esquina por medio. Los hechos de violencia son como un largometraje interminable con jóvenes en las figuras estelares. Esta mañana se estrenó la muerte de un vecino adolescente de 17 años por parte de otro de 18 aparentemente intentando robarle.
Por lo menos era la hipótesis que manejaba la gente de Homicidios a las once de la mañana. Anoche había ingresado al hospital el chico Kevin Catriel Lopez con una herida en la región inguinal derecha que pasó de la Guardia a la UTI con asistencia respiratoria mecánica. Consignaron pérdida abundante de sangre. No pudieron sacarlo de un shock hipovolémico grave.
En torno a un poste de luz en la calle Suipacha y Paraguay la tierra iba absorbiendo una extendida mancha sanguinolenta. Allí fue el suceso. La Brigada detenía al señalado atacante y presunto ladrón de nombre David Alexis Lopez.
Los primeros apuntes del homicidio hablan que fue en ocasión de robo. Y que Lopez tiene antecedentes violentos y delictivos. Se estaba entrevistando a los conmocionados vecinos.