La escuela Illia situada donde se confunden el barrio Caballito y los 200 Años funciona en una zona complicada por no decir complicadísima. El sector está infectado de adictos y de negocios destinados a lucrar con su vicio. La matemática pobreza más adicción igual a violencia puede contarse en chicos heridos o muertos.
Sin ir tan lejos en Octubre del año pasado uno de 17 fue asesinado de un cuchillazo por otro de 18 en la esquina del establecimiento.
Cincuenta metros al norte por la calle Sarapura la gente de Drogas Peligrosas acaba de cumplir un allanamiento por lo que sabemos con resultado positivo.
Para los expendedores el delito se les va a agravar por ser cometido “en las inmediaciones o en el interior de un establecimiento de enseñanza”.