

“Quién sabe. ¿A ti te han besado alguna vez?
—No…”
Mariana Inés Arredondo
Condenaron a un agrario con finca en la ruta a las Varas de Pichanal a nueve años de prisión. Corolario de un juicio en su contra por abuso sexual gravemente ultrajante continuado luego que una sobrina de trece años dijera que el tío Coco (42) la obligaba a mantener relaciones sexuales.
Ella vivía con él y su familia. Era alumna de una escuela rural cercana. En diciembre del 2024 habló.
La pericia médica descartó penetración. Sin desfloración ni signos compatibles con abuso escribió la médica del CIF. Se tuvieron por ciertos los manoseos. Toda gente de campo.

Antes de la sentencia el acusado alegó que tiene una hija de esa edad que no sería capaz de hacer lo que decían. Fue defendido por la abogada Cecilia Barba.
Como siempre en estos casos la cámara Gesell manda. Los dichos de una menor de edad se refrendan. Por más que el relato y la realidad, en parte, no se conjuguen.
