“¡Perros! -se inquieta Ochoa- ¡Perros de policía!
-¿Cómo sabe que son de policía?- pregunta Funes.
-Porque me vienen siguiendo…”
Un hombre en soledad Roberto Fontanarrosa
En la Policía la marca “Chaqueñito Cabral” es sinómino de delincuencia. Juan Daniel “Chaqueño” o “Chaqueñito” Cabral (28) de la manzana de San La Muerte en Madereros se involucró o fue involucrado en innumerables delitos desde que era un chico. No había desmán, asalto o tiroteo que no se mencionara su nombre.
No terminaba de salir en libertad que ya era un prófugo. Se ganó en el 2014 dos años y seis meses de prisión en suspenso. En Julio del 2020 en una persecución trasmitida por radio un ejército azul lo pilló camino al basural. Su cartel permitía publicitar la captura de un peligrosísimo maleante.
Las causas en su contra llegaron a Juicio el 27 de Mayo. Eran unas amenazas con arma, un abuso de arma, una portación ilegal de arma y un robo calificado. Defendido por el abogado Julio Villalba la acusación se evaporó a lo largo de las audiencias. No había una sola prueba que no fueran chismerío o dudosos testimonios tomados por la Policía.
En el asalto a unos colectiveros que les llevaron las valijas a punta de pistola un desconocido les batió que el flaco con casco era un tal “chaqueño”, con esa evidencia no se puede condenar ni a Robledo Puch. El Viernes Cabral fue absuelto de todos los cargos y ordenada su libertad.