“…Son gente mala y nos robaron dos muchachas: a Lupita, la que se iba a casar con Herminio, y a la hija de Crescencio. Como nos tomaron desprevenidos, que andábamos en la faena, no pudimos evitarlo. Se las llevaron a fuerza al monte y ai las dejaron tiradas…”
La muerte tiene permiso Edmundo Valadés
Cuando leímos que habían detenido en Embarcación a un tipo de 36 años al que tienen grabado por cámaras de seguridad llevando en su moto a la Micha Celeste Yanet Miranda (18) las horas precedentes a que fuera estrangulada en la entrada de monte saliendo de la ciudad al norte el pasado Domingo 7 de Abril nos vino a la memoria otro bestial femicidio ocurrido en Septiembre del 2011 en Orán.
Fue victima la bella Cintia Romina Romi Martinez (16) al que un ogro motorizado de 37 años trasladó también de madrugada a las afueras pasando el puente del arroyo Zenta, límite urbano al norte, para violarla y romperle la cabeza con un fierro. Al sospechoso del departamento San Martín lo apodan GORDO FRONDIZI al condenado en la Cámara del crimen de Orán a 15 años en Octubre del 2013 GORDO JUBILADO. Los dos gordos.
Y usted se estará preguntando cómo le dieron esa pena habiendo matado y violado alevosamente a una chiquilina. Es que en estos últimos años ha corrido mucha agua bajo el puente en materia de castigar a los femicidas. En aquella época, que no es tres siglos atrás sino apenas ocho años, las penas eran ridículas.
Un mes antes del insípido castigo contra Carlos Ramón gordo jubilado Acosta para quien el Fiscal pidió veinte años y los Jueces le dijeron no es para tanto tené en cuenta que solo violó y asesinó a una adolescente, vamos, le dieron tres años al Piraña Cristian Contreras (42) que estranguló y enterró en la basura para quemar del fondo de la casa a su mujer Angélica Tissera (30) porque le dijo que andaba con otro y le dió una emoción violenta. Con sorna e impotencia titulamos en la edición papel 348 lo condenan a tres años por matar y enterrar a su mujer ASÍ CUALQUIERA.
La sentencia quedará en los anales del viejo machismo que se resistía a partir en la Justicia local. Hoy estas dos personas serían condenadas sin lugar a ninguna duda a prisión perpetua, responsables de matar a una mujer por ser mujer.
Superada una etapa contada en siglos en los que por poco no felicitaban al hombre que acababa con su mujer adúltera. Cuando meter los cuernos era una prerrogativa masculina. Carlos Ezequiel gordo frondizi Martinez de barrio El Bordo del que dicen hacía trabajar a las chicas adictas no va a tener la suerte del otro gordo predecesor que va a estar libre dentro de diez años, en el 2029.
Si lo encuentran culpable en Juicio tiene la perpetua asegurada.