

“Yerros desapacibles hasta para las águilas…”
Cuentos fatales Leopoldo Lugones
En agosto del 2016 Martín Federico Olivera (49) en su carácter de secretario general del Sindicato del Azucar firmó la paz con la Seabord luego de varios meses de cortes de ruta y represión.
Era la cabeza de los trabajadores y el mediador la cabeza regional de la Iglesia el obispo Gustavo Sanchetta (61).
El religioso se fue al año siguiente a Roma pero tuvo que volver denunciado por seminaristas de conductas sexuales abusivas. En febrero del 2022 lo condenaron a cuatro años de prisión efectiva.

Al sindicalista lo denunció por abuso sexual su ex esposa y madre de sus tres hijos. Tras separarse en 2023. Lo detuvieron el año pasado. La imputación incluía desobediencia judicial, robo, lesiones, abuso sexual con acceso carnal tentado y consumado.
Hoy fue sentenciado a ocho años de prisión efectiva.
Según la tenida por victima toda la relación matrimonial de más de veinte años fue a la fuerza tanto en la esfera sexual, psicológica y económica. Olivera fue defendido por el abogado Cristian Illezca. Va a casar el fallo.
El destino de los dirigentes del acuerdo hace nueve años fue el mismo. Una abrupta caída.
