
“Tuvo la impresión de que pronto no la vería más…”
¿Qué hora es? Elena Garro
Un bagayero de 35 años del 4 de Junio venía preso desde el último año nuevo acusado de tentativa de femicidio contra su mujer.
Borracho encrespado de celos le saltó la chaveta por un WhatsApp que ella recibió y tras golpearla (ya tenía denuncias de violencia de género) le gatilló en la cabeza con una Bagual 22 largo cargada con ocho balas punta hueca no saliendo ninguna. El hombre, entonces, se tiró en la cama y se puso a llorar. Ella aprovechó para escapar dando aviso a la Policía.
Lo agarraron en la Pinturita.
Hoy en una audiencia multipropósito su abogado Fernando Ruiz acordó bajando el delito a lesiones leves agravadas, amenazas y portación ilegítima de arma que pagara su conducta violenta con dos años y seis meses condicional.
Trabajó un detalle crucial. Según la pericia balística el arma no había sido percutada. La victima, de miedo, sintió el gatillo. Hubiera sido un desastre. Era apta para el disparo con parámetros normales de celosidad.
