“El hombre es fuego y la mujer paja. No entendí…”

Las primas        Aurora Venturini

Acusado de haber forzado sexualmente de una chica de 13 años, hija de la empleada doméstica que trabajaba en su casa en noviembre del 2019, Ernesto Burgos (68) un muy conocido empleado municipal con años de años en bromatología fue condenado hoy. Le impusieron ocho años de cárcel, dos más del mínimo para el delito.

La víctima con 18 años cumplidos declaró en el debate confirmando que Burgos la metió en una pieza le bajó las calzas y la penetró cosa que la afectó al punto de convertirse en una adicta, de autolesionarse, de sufrir pesadillas y de haber vuelto a la casa de su violador dispuesta a matarlo aunque a cambio le robó el celular y lo vendió.

El jubilado municipal se reputó inocente “solo Dios y la Virgen saben que esto nunca ocurrió… pido se haga justicia a mi favor…”.

Pasaron tres años desde el hecho a la denuncia. Fue un novio que convenció y acompañó a la chica a la comisaría de Los Lapachos.

Burgos lleva un año y un mes preso.

Selló su destino la cámara gesell más la ratificación en sala de audiencias de la afectada.