“…Terminaban muy despeinadas, fumando porro cuando pintaba la cumbia lenta del fumanchero: bailen cumbia cumbianchero /que llegó el fumanchero /fumando de la cabeza / empinando una cerveza…”
La virgen cabeza Gabriela Cabezón Cámara
Una imagen vale más que mil palabras. Contar un video es bastante estúpido. Nosotros, que somos un poco estúpidos, relataremos un video de cámara de vigilancia del 21 de Octubre que se hizo público el 24 sobre un robo ocurrido, cuando no, en la terminal, del rubro arrebato de pareja de motochorros, cuando no. Es un cortometraje que indigna primero y en el final te devuelve las esperanzas aunque sin mostrarte la conclusión feliz. Es una delicadeza del guionista del 911. Una interrupción abrupta cuando los malos están a punto de caer.
Se ve a hombre y mujer en una moto yendo al norte por la San Martín que relojean a una chica en uno de los bancos distraída de la plazoleta larga frente a la entrada y salida de pasajeros. La mujer se desmonta, se la ve medio drogada, se queda delirando en medio de la calle porque al socio le cuesta arrancar la moto hasta que sale de cuadro, y ella, esquivando primero una camioneta, encara a la victima y le forcejea hasta arrebatarle una cartera cartuchera cruzando corriendo la San Martín, otra vez casi levantada por un auto, para montarse en la moto que había dado la vuelta esperando detrás de la barandilla y escapar a mil. Se observa con claridad la desesperación y la impotencia de la victima que es misma sufrida por muchas otras en la misma zona y con más claridad la gente y unos policías que corren a los cretinos con una velocidad que, vos decís, los pillan en la esquina. En efecto el motochorro quedó reducido en la Sarmiento pero la ladrona saltó y se metió en la feria latinoamericana donde un agente le cortó el mambo, recuperando el botín de ciento sesenta pesos que Sofia (32) cargaba en su bolsito. Puso la denuncia en la 20.
El detenido fue identificado como Pablo Jose Mauricio de 39 años y la arrebatadora era una vieja conocida en el mundo del delito de nombre Griselda Soledad Flores (27) una adicta que estuvo metida en dos homicidios de mujeres, el de Noelia Florentina Mirabal (17) en el 2004 y en el de María Ala (16) en el 2007. Caedora habitual en Drogas peligrosas y un prontuario interminable. Su papel fue, gracias a la Policía y a los que los corrieron, el de actriz de una tentativa de robo. Hay que ver si sus antecedentes permiten que quede presa. Su trabajo no tuvo buena crítica en las redes. Solo generó insultos, odio y pedidos que no vuelva a pisar más una pantalla. Que no vuelva a pisar la calle, más en concreto.
