“Cierto misterio lo rodeaba; parecía ruso…”
El disparo Alexander Pushkin
El trámite de un presidiario tuvo una factura rocambolesca. Recreando los operativos de custodia propios de las grandes figuras del delito y la política internacional sorprendió ayer el traslado de Julian Alberto Mac Giver Diaz (50) a fiscalía para finiquitar un abreviado.
Firmó un año y medio de prisión efectiva como partícipe secundario de un robo con arma sin peritar que le dieron por cumplida. La acusación primigenia de liderar una asociación ilícita de bagayeros asaltantes que operaban en la frontera se fue al tacho. Estuvo su defensor el abogado Joaquín Velez.
Mac Giver cumple en la cárcel de Güemes una condena de cuatro años luego de ser interceptado en Pichanal en febrero del 2021 con tres kilos de marihuana camuflada en una bolsa de comida para perros.
En la mitología policial es la encarnación del bandido irremediable. Le suma fama su hijo el “Cabezón” Oscar Alberto Diaz (30) que es tenido como el rey de los sicarios tras ser capturado en bolivia prófugo del homicidio callejero de un tarijeño vinculado al negocio narco.
Quizá eso explique semejante despliegue.
Con el abreviado Mac Giver quedó a un paso de la condicional.