“Después salían a la noche todo mal…”
El monstruo Mariana Enriquez
El primero de octubre del año pasado no era para Facundo Adrián Tolay (45) un trabajador del Ingenio, casado con cuatro hijos, del dos de abril, un día especial. Desde el 2011 cumplía la rutina de levantarse a las cuatro y tantas de la mañana e ir caminando un par de cuadras a esperar el transporte que lo dejaba en la fábrica. Eso en el turno mañana. Llevaba su mochila con las antiparras, los protectores auditivos y todos los elementos de seguridad que se exigen en planta. Volvía a las tres de la tarde. No volvió.
Lo habían encontrado cerca de la parada boca abajo empapado de sangre un rato después de salir de su casa. Sin el celular que le había robado de arrebato Yamila Jimena Quispe (20) una adicta conocida como la hija del carbonero y sin el bolso que le llevaron los compinches de rancho y de droga el “Pekela” César Cruz (27) y el “Chino” Gerardo Areco (25) luego de partirle base del cráneo con una piedra.
El trío pipero se juntaba a fumar y rascarse en la entrada del barrio frente a una carnicería.
Los enjuiciaron del 14 a hoy 24 de agosto acusados de homicidio en ocasión de robo. La Fiscalía pidió catorce y doce temporadas de cárcel. El Juez fue menos severo. Les impuso diez años a Quispe y Cruz y uno más a Areco por ser esta su segunda condena por homicidio.
Lo que hicieron no tiene nombre. Contra un padre de familia trabajador que no les hizo absolutamente nada.