“Ven a verlos por la mañana
con la gorra hasta las orejas.
Han desvalijado a las viejas
del Asilo de las Hermanas…”
Ladrones Raúl Gonzalez Tuñón
Los ladrones por oficio o especialidad salen de la cárcel y siguen siendo ladrones. No sé hacer otra cosa hermano. Así como los ingenieros no dejan de ser ingenieros por más que pasen una temporada tras las rejas, ni los curas, curas. Sirva el ejemplo del párroco de la Iglesia del barrio Güemes Renzo Ferrazzo condenado en Orán a nueve años de cárcel como corruptor de menores reinstalado al cumplir la pena en una capilla de la selva panameña.
Los ladrones no tienen como otros profesionales un colegio que los aglutine ni un sindicato que los proteja ni un sistema de pensiones pero sus fichas están ordenadas en los archivos policiales y sus caras ordenadas en hermosos cuadros que los investigadores repasan cada vez que hay un robo. Con el dedo hacen un apeten sen bren tucuman len yi y eligen alguno, no le pueden errar, ladrones son ladrones.
A fines de Agosto recibieron modestas condenas el reincidente “Cabezón” David Orlando Lira (38) y el “Marciano” o “Tronquito” Walter Benancio Lamas (33), ambos de aeroparque, a cinco años y monedas recluídos, por asaltar a un Salteño que fue a cambiar dólares a Bermejo en la ruta 34 donde lo dejaron en bolas y a los gritos cerca de Colonia y se volvieron en el auto hasta Pïchanal donde los atraparon.
Los ladrones, ellos y dos que se escaparon dejando un Ethios morado abandonado, usaron para el trabajo atuendos de policías y falsas reglamentarias. Fue en Junio del 2018. La Policía pensó que entre los cómplices pirados estaba el hermano mayor de Marciano, ladrón veterano, el “Tronco” Daniel Alejandro Lamas (36).
Al Tronco lo pillaron en Octubre como líder de una banda de asaltantes de bagayeros que se disfrazaban de policías para sus golpes. Junto a otros está acusado de robo calificado. Su defensor el abogado Santiago Savoy logró sacarlo de la cárcel con una fianza de doscientos mil pesos con depósito bancario y la firma del Juez Raúl Lopez concretada este Viernes 6 de Septiembre.
Con una serie de restricciones para su libertad. No puede salir del país ni de la ciudad sin pedir autorización, debe presentarse ante la Justicia cada vez que lo requieran y en síntesis portarse como un angelito hasta el debate. Si lo absuelven le devuelven la plata, si lo condenan, no. Y vuelve a la redonda. Un riesgo laboral.
